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La montaña me encanta. Más por el paisaje, que por ganas de darle al “trekking”, que de alpinismo ni hablamos.

 

Es cierto que, en otros momentos de la vida, hemos hecho mucho senderismo, especialmente por Castilla y León, que para eso es fantástica, pero aunque sólo sea para verlos, los paisajes de montaña tienen para mí un atractivo especial. Especialmente si hay lagos o fiordos de por medio.

 

Si tuviera que elegir uno de los muchos y bellos lugares de montaña que hemos conocido, sin duda me quedaría con las Islas Lofoten, al norte de Noruega. (La foto que abre la web está tomada allí)

 

 

 

Reine. Islas Lofoten (Noruega)

 

 

Los puntiagudos picos a nivel del mar, los fiordos y las casitas de colores son de una belleza increíble. Una pasada. Es un lugar maravilloso con una sola pega…

 

¡Está a más de 4.000 kilómetros de casa! Vamos, no es el destino ideal para un fin de semana…

 

Quizás algún día vaya allí a escribir mis memorias. ¡Y ver las auroras boreales!

 

Quien sabe… ¡A veces los sueños se cumplen!